.Una edición más -en esta ocasión celebrando 50 aniversario-
Madrid Cibeles Fashion Week arranca en el mes de septiembre y lo hace, como ya es habitual, con la pasarela de jóvenes diseñadores
El Ego. En esta ocasión han sido
10 los diseñadores seleccionados para mostrar sus propuestas en este gran escaparate de la moda que es el pabellón 14.1 de Ifema.

Comenzó la mañana con
los catalanes Bohento. Correctos, con propuestas muy llevables sin arriesgar prácticamente nada. Cuca Ferrá y Pablo de la Torre, que repetían por segunda edición consecutiva en El Ego, han continuado en la línea que iniciaron el pasado febrero:
ropa muy ponible y sobre todo muy vendible, pensada para colgar de las perchas de cualquier tienda y de cualquier armario femenino y masculino, sobre todo la primera parte de la colección, de estilo
sport, bastante más interesante que la segunda, de noche con vestidos en raso, demasiado vista. Muy poca gente en las gradas y quizá no los más adecuados para abrir una pasarela a las diez de la mañana, que necesita algo más de movimiento y marcha para evitar bostezos.

Sigue sin gustarme la propuesta de
Marta Montoto. Volvió a apostar por el pijama infantil, volvió a querer ocupar portadas por el camino fácil de la provocación sin sustancia. Inspirándose, aunque apenas en algunas máscaras y complementos, en la lucha mexicana, continúa con su estética de andar por casa confeccionando principalmente calzoncilos y pijamas de una pieza (esta vez en corto para el verano).
Una pena que la joven gallega no salga de lo mismo. Buena selección de música, eso sí, que logró caldear un poco el frío y desolado ambiente de la Sala Cibeles.

Cambio a la Sala Neptuno para recibir las colecciones de
Nora Urkia y
Valdnad. La vasca presentó una propuesta inspirada en el safari africano. Su "Selva de asfalto" se llenó de tejidos con estampados animales en prendas con juego de volúmenes y marcado contraste entre tamaño oversize y patrones ajustados.
Una colección sin mucho que decir donde lo que más me gustó fueron las maletas estampadas y las faldas lápiz con el que se está conviertiendo en el color de la temporada: el verde jade de Chanel que también utilizó David Delfín en
Playback.

Mucha mezcla de materiales, texturas y tejidos en la propuesta de la joven asturiana Ana Pérez Valdés (
Valdnad) que se inspiró para su colección en la ropa deportiva de los años 30, principalmente en aquella relacionada con la caza y la lucha. Pieles, algodones, sedas, plumas, colores naturales y formas orgánicas en prendas confeccionadas en patchwork y bordadas a mano.
Me horrorizaron los complementos a base de esqueletos de animales y me gustó su trabajo sobre tela denim sin llegar a entusiasmarme por completo su colección algo anodina.
El portugués
Ricardo Andrez (como ya nos comentaba Andrés Aberasturi -comisario de El Ego- durante la
entrevista que concedió en febrero a
Con dos bolsa en cada mano, El Ego de Cibeles está abierto también a diseñadores internacionales aunque la mayoría de los candidatos sean españoles) puso la nota más
streetwear a la pasarela joven de Cibeles con una colección exclusivamente masculina en la que fusiona referencias urbanas y tradicionales. Popelín y algodones en prendas de colores blancos combinados con flúor.
Buen trabajo del portugués sin rozar lo sublime.
La mañana transcurría bastante aburrida sin haber visto nada especialmente interesante hasta que llegó
Carlos Doblas. Quédense con este nombre porque estoy segura de que va a dar mucho que hablar. Aún estudiante de moda en el IADE y ayudante de diseño de
David Delfín, el madrileño presentó
una de las mejores colecciones del día. Para apoyarle, como no, su mentor y amigo David Delfín, y Bimba Bosé comiéndose como siempre la pasarela. Muchos aplausos y muy buen sabor de boca dejó el joven diseñador con una propuesta primaveral inspirada en los años 90 de líneas rectas y apenas volúmenes. Flores rosas y una espectacular paleta de colores en rojo, verde y gris para la mañana con
cortes que reinventan el sastre clásico. Para la noche, el negro y el plata. Los problemas de algunas modelos con los tacones no lograron ensombrecer este fantástico
debut al que sin lugar a dudas seguirán muchos éxitos.


A partir de aquí la jornada se animó mucho. Genial
36º by Sara Coleman jugando con el raso y los
hilos de seda, algodón y lino trabajados de manera artesanal en el telar dando como resultado un juego mágico y fascinante: flecos y nudos, madeja de confusiones, sentimientos e ideas enredadas. La suavidad de los crepes y gasas de seda en tonos azules y grises se fusiona a la perfección con la textura rústica de los hilos que se acoplan a las prendas como si fueran complementos formando una nebulosa de azul, gris, marrón y marfil.
Me encantó la colección de la catalana formada en la Escuela Superior de Moda Felicidad Duce (foco de grandes talentos como la excepcional Krizia Robustella a la que veremos el martes).


Como un soplo de aire fresco y alegría llegó
Amai Rodríguez. Una propuesta muy barroca y teatral, arriesgada y buscando la foto pero con un muy buen trabajo de creación de moda detrás. Preciosos los vestidos que se intuían debajo de máscaras, jaulas, caretas y otras parafernalias.
Gran lección de savoir-faire de la gallega que demostró que se puede romper con las reglas y proponer un espectáculo transgresor sin necesidad de olvidar la creación de moda. Muy buena la música del desfile que acompañó en todo momento las salidas e hizo vibrar al auditorio. Su magnífico trabajo le hizo llevarse el
Premio L'Oreal al Mejor Diseñador Joven. ¡Merecidísimo!


Y cerrando el grupo
Alberto Tous que repetía también en El Ego. Mejor que la vez anterior aunque sin llegar a impresionar, el mallorquín dejó de lado los volúmenes de febrero para apostar por una mujer que marca sus formas con prendas muy femeninas y ajustadas. Mucho encaje y bonita mezcla de tejidos en una escala cromática del blanco al negro.
Lo mejor: las telas, verdaderas protagonistas de la colección.
Terminó la jornada la peruana
Andrea Llosa afincada en Barcelona y con formación también en la Felicidad Duce. Tejidos y prendas artesanales en cuatro líneas muy bien diferenciadas por la tonalidad cromática:
nude, blancos, negros y grises.
Preciosos los ponchos en crochet tejidos a mano con lanas de su tierra natal y los pantalones pitillo elásticos en viscosa aunque difíciles de lucir sin ser modelo de pasarela. Botones, flecos y bordados en una colección bonita y bien hecha que puso un buen broche final a esta nueva edición de El Ego de Cibeles.

Como
notas curiosas de la jornada:
- El diseñador
Ion Fiz estuvo presente en todos los desfiles de El Ego desde primera hora de la mañana no perdiéndose ni un detalle ya que formaba parte del Jurado para dar el Premio L'Oreal.
- Encandiló, y mucho, la Dj contratada por
Swatch en el Cibelespacio para amenizar la mañana. Decenas de personas se reunieron a escuchar y fotografiar a la guapísima y magnética artista
Vinila von Bismark, así como para aprovechar un riquísimo
catering que por una vez no entendió de gente VIP y estuvo al alcance de todos. La performance contó además con la presencia del artista urbano neoyorkino Billy the Artist (que ha creado una colección para la marca de relojes) quien pintó en directo un
grafitti.


- La sinrazón del desfile de
Adolfo Domínguez, ya terminado el Ego y primero de la pasarela oficial de Cibeles. Una preciosa y algo seria
Gwyneth Paltrow en el
front-row provocó carreras, empujones y alguna que otra pelea entre decenas de fotógrafos y cámaras que se volvieron prácticamente locos con su presencia. Ante tal despropósito y ya pasada la hora marcada el diseñador gallego decidió comenzar el desfile sin música dirigiendo él mismo a las modelos desde
backstage mientras el público que abarrotaba la sala miraba asombrado sin entender nada de ese desfilar errático de modelos en el silencio.

Una de las hijas de Adolfo Domínguez, consciente del panorama, no dudó en levantarse y entrar a
backstage a hablar con su padre. El desfile fue interrumpido y comenzó de nuevo esta vez ya con música. Una música que, según las palabras del propio diseñador gallego, no fue de su agrado (la original parece ser que se perdió). Poca gente se fijaba ya en la colección después de tal desaguisado. Una no demasiado buena re-entrada en Cibeles, o sí, según como se mire, porque todos los medios hablarán de ella y a veces en este mundo parece ser lo único que importa. Eso, y sumar caras conocidas entre el público: Camen Lomana, Fiona Ferré, Fele Martínez y Boris Izaguirre fueron algunos de los que se dejaron caer por allí.
Como siempre, cuando todos llegan yo me marcho y regreso el martes para seguir apoyando el diseño joven español. No sin antes
recomendar dos blogs para seguir durante esta semana de la moda (en las últimas ediciones Cibeles se está convirtiendo también en un magnífico punto de encuentro de bloggeros y bloggeras de moda muy interesante y divertido):
- El fresco y divertido blog que la diseñadora de La Casita de Wendy
Brianda Fitz-James Stuart está escribiendo estos días cibelinos para
YO DONA. ¡No os lo perdáis!

- El exhaustivo y siempre a la última blog de Ariadna Ferret, o lo que es lo mismo,
Fashionisima.
* Todas las fotos de pasarela son cortesía de Yo Dona.